Título de La Nación - 26/07/2024 15:20:05

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Talento de familia. Es hijo de un consagrado actor y decidió ir por la herencia familiar con su propio éxito

En 2003, un pequeño Joaquín de cuatro años se sentó en una butaca del Teatro Ópera y observó a su padre convertirse en ‘El Zorro’ en la versión teatral de El Principito. Solo segundos alcanzaron para que se le llenaran los ojos de lágrimas y el corazón le latiera de orgullo. Ese fue el instante en el que se dijo a sí mismo “quiero hacer eso”. Hoy, 21 años después, la vida lo encuentra arriba de un escenario y a solo a 650 metros del teatro donde trabaja su ídolo.

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